lunes, 4 de noviembre de 2013

Jerusalem II, seguimos disfrutando de la cultura, la historia y los olores de la ciudad

Jerusalem da para mucho, para visitar muchos sitios, para pasar muchos días, para simplemente pasear, para escribir muchos posts... Pero tranquilos, este es el último que escribo sobre esta fantástica ciudad, aquí os contaré el resto de lugares que he visitado, personas que he conocido, cositas que he aprendido...

Dejando aparte la ciudad vieja de Jerusalem, existen otros lugares de gran interés, como por ejemplo el Museo de Israel, la entrada a 37 NIS. En este museo, aparte de exibiciones temporales, su principal atractivo es la exposición sobre la historia de Israel, no es que te cuenten mucha cosa nueva que no hayas podido oir conociendo la historia de Jerusalem, pero en el museo combinan las explicaciones con objetos arqueológicos de todas las épocas, que hacen más fácil sumergirte en la historia del país.


No sé si es porque hasta ahora los museos que he visitado de historia no los visitaba con mucho interés, el Museo de Israel lo disfruté bastante, las piezas arqueológicas que exponen están en muy buen estado de conservación, con muy buenas explicaciones, desde la época de la edad de piedra hasta la época de los otomanos, incluyendo herramientas hechas de piedra, mosaicos, esculturas griegas y romanas...

Otra de las exposiciones del museo es sobre la vida de Herodes, que a estas alturas si habéis seguido posts anteriores ya os sonará el nombre. Es conocido por construir la ciudad de Cesárea, Masada, finalizar la construcción del Segundo Templo... pero no sólo por eso. Al nacer Jesús, ordenó matar a todos los niños recién nacidos ante el temor de la llegada del nuevo Rey de los judíos, llegando incluso a asesinar a su propia mujer e hijos, los celas es un invento que viene ya de hace tiempo...

Aparte de estas exposiciones, esos días había una exposición muy interesante sobre la percepción de los sentidos, y como hay maneras de engañarlos, a través de efectos ópticos, la luz... Como el de estas fotos:


  
O efectos muy originales jugando con objetos variopintos, luz y sombras.


Como he comentado, el museo bien se merece una visita, donde pasarte 3-4 horas muy entretenidas, ya que no es sólo un museo de historia, sino que combinas la historia, con exposiciones modernas, diferentes culturas...

Otro de los puntos clave de Jerusalem, y una gran idea para finalizar un duro día de turisteo, es subir al Monte de los Olivos, así con la subidita el día se hace un poco más duro aún...jeje. El Monte de los Olivos es otro de los lugares más sagrados en Jerusalem, por un lado es donde se cree que Jesús oraba frecuentemente, y donde fue arrestado antes de su crucifixión, y por otro según las creencias judías es en este monte donde aparecerá el Mesías y donde Dios redimirá a los muertos al final de los tiempos, abriendo en la cima del monte las puertas al cielo. Por esto último, en el monte existe unos de las mayores cementerios judíos.


No es para nada mi intención crear morbo al poner la foto de un cementerio, pero es una de las partes más emblemáticas del Monte de los Olivos, y que guarda curiosidades como que todas las tumbas están orientadas en la misma dirección, hacia la cima del monte. ¿Por qué? Para que cuando llegue el final de los tiempos y se abran las puertas del cielo en su cima, los muertos resucitados no se equivoquen de camino, ¡y no es broma! :-D Además, el Monte de los Olivos nos vuelve a ofrecer unas privilegiadas vistas de la ciudad vieja de Jerusalem, y si a esto le unimos un atardecer ya tenemos la fotito maravillosa.


Y con esto acaba la visita a Jerusalem, han sido en total 4 días visitando la ciudad, viviendo una aventura histórica continua, y una aventura cultural continua. Simplemente el hecho de pasear por la ciudad vieja, pasar en menos de 1 minutos de la cultura cristiana a la judía, de la judía a la musulmana, es algo mágico y que con mente abierta se disfruta mucho. Si a todo esto le añades el estar alojado en casa de un gran couchsurfer como Hagai, ya tienes una estancia en Jerusalem para recordar siempre. Gracias Hagai por esos buenos ratos llenos de música, charlas históricas, culturales, cervezas, sishas...


Aunque la foto no es muy buena, Hagai es el del centro.

Con la visita a Jerusalem finalizan las 3 semanas de viaje por Israel, en el próximo post escribiré un resumen de cómo ha sido mi experiencia en este país, con datos sobre el dinero gastado, itinerario seguido.

Lo que es seguro es que si durante el resto del viaje todos los países me ofrecen tanto como Israel, ¡esto va a ser memorable!

Los únicos límites en la vida son los que tú mismo te pones.

No hay comentarios:

Publicar un comentario